CAZADORES CAZADOS

Qué prueba más definitiva para afirmar, no lo de Pacheco, que la justicia es un cachondeo, si no que la justicia no puede estar más politizada. La separación de poderes, de la que hablan los clásicos, se la pasa Zapatero por el arco del triunfo. Qué pensar de un juez que colgó la toga para hacer política con el PSOE, afirmando aquello que estaba bien abandonar la independencia para apoyar a la izquierda. Volvió a coger la toga y de la independencia nunca más se supo. El otro cazador, el bermejo, cuya aportación intelectual es vanagloriarse de su apellido. Que no tiene empacho en pregonar que se comporta según su ideología; o bien que se actuará según convenga la jugada. Y dice que su reunión con Garzón fue inoportuna. Si hubiera justicia y vergüenza como hay en otros países, estarían los dos en la cola del paro.

En manos de estos cazadores estamos.

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La expulsión de un parlamentario europeo de Venezuela ha vuelto a mostrar la hipocresía y sectarismo de estos del capullo en la mano. Independiente que el expulsado pertenezca a un determinado grupo político, representaba la soberanía española que lo designó parlamentario. Pero ya sabemos como las gastan estos que se hacen llamar progresistas, justificando el despotismo y la tiranía contra un compatriota. De tradición les viene a esta izquierda de fortuna, que entienden la libertad de expresión cuando la practican ellos, cuando la practican los demás: insultos y descalificaciones, y no digamos en otras épocas. Cómo en lo de mentir y manipular son insuperables, no quieren que se les recuerde que lo declarado por el parlamentario del PP contra Chavez es pecata minuta de lo que por aquí, y por parlamentarios de varios pelajes, se le dijo a Bush. Vamos, lo más lindo, fue llamarle asesino. Pero este es el PSOE que tenemos, complaciente con los tiranos: Castro en Cuba, Chavez en Venezuela, y Mohammed en Marruecos.