jueves, 18 de diciembre de 2008

ALIANZA DE TIRANIAS


Sabido es de todos, el empeño de este desgobierno Zapaterino en arruinar la Constitución sin pagar peaje en el Parlamento. Tarea de destrucción a la que una ciudadanía, anestesiada o no, asistimos impotentes. Pocos colectivos se oponen abiertamente a este fraude: Tenemos 17 sistemas educativos. Cuatro lenguas oficiales. Dos representaciones diplomáticas, con la vasca y gallega pronto serán cuatro. 17 policías autonómicas, que bailan al son de cada gobierno autónomo y para nada al del interés general. Sistemas distributivos distintos. En definitiva 17 taifas.
Esto es así por mucho que lo quieran ocultar o maquillar. Es la constante de este gobierno, decir lo contrario de lo que hace, o simplemente negar la evidencia: Ya sea que no nos afectaría la crisis, ya sea que no negociaban con ETA, o que nuestros soldados están repartiendo juguetes en Afganistán.
Si a ello añadimos que el derecho a trabajar en otras autonomías es imposible, porque te aplican el nivel de conocimiento de sus lengua autonómicas, para decirte que sin ese idioma tu cualificación profesional no les interesa (esto les pasa incluso a médicos).
Que tampoco va a durar mucho que tengamos más de una selección deportiva. Las competiciones que se organicen en esta cosa que se llamaba España debe contar con la aprobación de cada taifas (vean lo de la vuelta ciclista a España).
Que todo lo que signifique y haya significado integración, confluencia, o beneficio para todos; se ataca, se vilipendia; sin que se exijan responsabilidades y se pidan condenas. Muy al contrario, parece que hemos de aceptar todo este desbarajuste como lo más normal y moderno: No solo se ataca al rey y a la bandera, es que el sanguinario de Juana Chao se ríe de sus víctimas de vacaciones en Irlanda. Que ANV, la franquicia de ETA, no va a ser disuelta por el gobierno, lo que puede desembocar en más diálogos con los terroristas. O que estos saquen matricula de honor en las universidades vascas, en examen a los que no se presentan.
Estos son los ejes de la política de Zapatero: su fijación enfermiza por una época de nuestra historia, la II Republica, que está dispuesto a revivir “como sea”. Y su odio al cristianismo, y todo lo que ha significado de luces y sombras para nuestra cultura occidental. Se explicaría así, que aún no haya desmentido su pertenencia a una logia masónica.
Por ese camino marcha su próxima ofensiva: Hacernos a todos laicos por decreto. Equiparar el cristianismo con el Islam. Seguir con su majadería de Alianza de civilizaciones, con tal de atacar a la religión mayoritaria que declaran las personas. Aquí os dejamos, al respecto, parte de un artículo firmado por Guillermo Elizalde

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LO QUE ESTÁ MAL EN EL ISLAM

A raíz del discurso que el actual Papa, Benedicto XVI, pronunció en la Universidad de Ratisbona el pasado mes de Septiembre, de la que había sido catedrático y vicerrector, donde versó sobre el necesario dialogo entre culturas y religiones, desde la fe y la razón. Discurso al que respondieron, por carta, 138 sabios musulmanes, y que propició, por iniciativa papal, el primer Foro Católico-Musulmán.
Este Foro, entre una delegación vaticana y varios representantes de los sabios musulmanes, clausurado recientemente, ha llegado a las siguientes conclusiones referidas al respeto por las personas y sus opciones: en asuntos de conciencia y religión, el derecho a practicar la propia religión "en privado y en público" y el derecho de las minorías religiosas a tener sus propios lugares de culto y a no ser "excluidas de la sociedad". O sea, que los 138 firmaron en Roma justo lo contrario de lo que defienden en La Meca.
El sultán de Sokoto y primer firmante de la Carta de los 138, Ababakar de Nigeria, es el líder musulmán de un país que aplica la sharia en 12 de sus 36 estados, que ha cerrado docenas de iglesias y escuelas no islámicas y en cuyo territorio es frecuente el asesinato de apóstatas. Entre los referidos 138 "sabios", se encuentra también el clérigo Abu Solaiman, del Consejo de Ancianos Ulemas de Arabia Saudí, donde están proscritos los crucifijos, las iglesias, la misa, e incluso el rezo en domicilios privados. También el ex ministro argelino, Mustafá Cherif, firmó la carta, aunque en su país se aplican penas, entre tres y cinco años de cárcel, a quien propone otra religión a un musulmán. Yusuf al Ghoneim, ex ministro de Kuwait, es otro miembro de los 138, en su país, el Código Penal castiga la apostasía con la muerte.
Uno más: el muftí de Estambul, Mustafá Çaorici, en cuyo país los cristianos no pueden ser policías ni militares.
Apenas hay signatarios de la carta que no procedan de un país al que no se pongan graves reparos en el Anuario 2008 de la Libertad Religiosa en el Mundo. Pero no se trata sólo de políticas nacionales ajenas a la voluntad de los firmantes. Firmó también, junto a los 138, Ahmad al Tayeb, el mismo rector de la universidad egipcia Al Azhar que en 2005 lanzó una fatua contra Mohamed Hegazy, por haberse convertido al cristianismo. En cuanto a Aref Alí Nayed, padre de la misiva, director del Real Centro de Estudios Estratégicos Islámicos, repudió por "triunfalista y provocativo" el bautismo del converso Magdi Allam en el Vaticano. En fin, algo está mal en el Islam cuando 138 intelectuales musulmanes apoyan una declaración en defensa de la libertad religiosa y al mismo tiempo violan o cohonestan la violación de dicha libertad en sus respectivos países.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta página que parecía que iva a poner sobre la mesa los problemás medioambientales y sociales de tharsis y del andévalo está derivando a una vulgar gaceta panfletaria que no deaprovecha la menor oportunidad para hacer apología de ideas falangistas. Se le ve el plumero a alguno de los escribientes. Seguid así que vais bien.

Anónimo dijo...

Impresionante la exposicion de este anonimo, al que dejan entrar los del foro incluso para que les insulten. Pero no te precoupes, cualquiera puede ver de donde sales.

Ante la falta de argumentos acude como todos ellos al pasado, mientras estan desmoronando el presente y lo que es peor el futuro incluido esa region del Andevalo.

Yo espero que el foro conteste adecuadamente a este panfletario de mantras.

Dirigièndome a èl le pregunto si en las ideas de aquella ideologia estaba la de que la Banca y todo el entorno corrupto que la rodea podrìa haber medrado a costa del pueblo y lo que es mas serio a costa de un gobierno que se dice socialdemocrata como el actual
y que es el que les està haciendo concesiones sin cuentos, la ùltima la bajada de impuestos a los poderosos de estos estamentos para igualarlos a los que pagan el IRPF del 18% incluìdos los jubilados que cobran miserias, o de todos los trabajadores. Pero por ultimo te dire que puedo establecer mas comparaciones de este tipo, pero a ti que màs te da.¿no?. Sigue con tus mantras y asì habrà alguien que te siga. Pero deja en paz a las personas honradas.
Saludos. JR.

Amigos de Tharsis dijo...

El comentario del primer Anónimo, que no entra para dar su opinión sobre el asunto expuesto, sí para descalifica el nuestro, diciendo que hacemos apología, nada menos que falangista. Y aunque todas las opiniones son respetables, cuando se emite sentencia es necesario argumentarla, pues de lo contrario carecen de validez.
El desacuerdo que nuestro comunicante parece encontrar en nuestro comentario, es que critiquemos al poder, cuando es este uno de los fundamentos de un sistema democráticos: disfrutar de libertad para criticarlo, y hacer uso de ella. Cuestiones que han de ir pareja en un sistema de libertades.
Nosotros vamos a seguir criticando al poder, a cualquier poder, y si el actual lo representa D. José Luís Rodríguez Zapatero, no le quepa duda que no nos vamos a privar. Porque no nos negará que, desde la responsabilidad que ostenta, en este país se están cometiendo errores, algunos rayando la legalidad.
Pero usted puede creer que Zapatero no comete errores, y si lo piensa así, debería atreverse a manifestarlo, con ello, quienes entran en este blog podían conocer sus argumentos.
Lo de falangista nos resulta curioso, porque no suele ser el descalificativo que se lanza a quienes critican a Zapatero. El más utilizado es el de fascista, y quienes lo utilizan se suelen calificar de progres y socialistas de toda la vida. Y ni son lo uno ni lo otro, en definitiva, sectarios, que al igual que dijo el poeta:"desprecian cuanto ignoran".
Parece que le preocupan también los problemas medioambientales de Tharsis, y nos parece estupendo porque algo de ello ya hemos publicado aquí. A lo mejor usted se lo perdió y no pudo, o no quiso, intervenir. Ni sabemos si esa preocupación medioambiental suya es consecuente o postiza, de la que también se adorna la progresia sectaria, pero a la hora de la verdad prefieren la barrera al ruedo; eso sí, jaleando a las partes para sacar tajada. Nosotros, desde Amigos de Tharsis, llevamos interpuestas más de seis denuncias, ante la Fiscalía y en el Juzgado de Valverde, por problemas medioambientales de Tharsis. Aparte de comparecencias ante la prensa o cartas a los periódicos. Suponemos que usted podrá decir otro tanto, ¿o no?
Nos parece que no debemos limitarnos a hablar solo de Tharsis o del Andévalo, porque no hay que olvidar la trascendencia que, para muchos pueblos o comarcar, o simplemente para la convivencia; tienen las decisiones que adopta el Gobierno de ZP.
En la nueva entrada del blog hemos vuelto a hacer uso de nuestra libertad para criticar al poder, esta vez municipal, y de nombre D. Lorenzo Gómez, y volveremos a respetar a quienes no compartan estas críticas pero sin aportar argumento alguno.

Anónimo dijo...

¿FALANGISTAS? ¿y eso que es? quienes se gastan 4.5 millones en comidas al mes en una provincia como huelva son falangistas? ¿o eso es socialsmo? la gente no va a abrir los ojos, pero el dia que les pique la barriga- y no falta mucho- hablaremos del gobierno...
P´alante Amigos de tharsis hay que seguir desenmascarando a estos tipos. La falange es un partido y aunque yo tampoco soy falangista, creo que no debe de ser peor ese ideario-que no conozco- que tener a esto golfos al mando de la nave.

Anónimo dijo...

Largo, pesado, y ...muy moderno. Esto he encontrado.
Cuando, en marzo de 1762, un hombre nefasto, que se llamaba Juan Jacobo Rousseau, publicó El contrato social, dejó de ser la verdad política una entidad permanente. Antes, en otras épocas más profundas, los Estados, que eran ejecutores de misiones históricas, tenían inscritas sobre sus frentes, y aun sobre los astros, la justicia y la verdad. Juan Jacobo Rousseau vino a decirnos que la justicia y la verdad no eran categorías permanentes de razón, sino que eran, en cada instante, decisiones de voluntad.

»Juan Jacobo Rousseau suponía que el conjunto de los que vivimos en un pueblo tiene un alma superior, de jerarquía diferente a cada una de nuestras almas, y que ese yo superior está dotado de una voluntad infalible, capaz de definir en cada instante lo justo y lo injusto, el bien y el mal. Y como esa voluntad colectiva, esa voluntad soberana, sólo se expresa por medio del sufragio conjetura de los más que triunfa sobre la de los menos en la adivinación de la voluntad superior, venía a resultar que el sufragio, esa farsa de las papeletas entradas en una urna de cristal, tenía la virtud de decirnos en cada instante si Dios existía o no existía, si la verdad era la verdad o no era la verdad, si la Patria debía permanecer o si era mejor que, en un momento, se suicidase.

»Como el Estado liberal fue un servidor de esa doctrina, vino a constituirse no ya en el ejecutor resuelto de los destinos patrios, sino en el espectador de las luchas electorales. Para el Estado liberal sólo era lo importante que en las mesas de votación hubiera sentado un determinado número de señores; que las elecciones empezaran a las ocho y acabaran a las cuatro; que no se rompieran las urnas. Cuando el ser rotas es el más noble destino de todas las urnas. Después, a respetar tranquilamente lo que de las urnas saliera, como si a él no le importase nada. Es decir, que los gobernantes liberales no creían ni siquiera en su misión propia; no creían que ellos mismos estuviesen allí cumpliendo un respetable deber, sino que todo el que pensara lo contrario y se propusiera asaltar el Estado, por las buenas o por las malas, tenía igual derecho a decirlo y a intentarlo que los, guardianes del Estado mismo a defenderlo.

»De ahí vino el sistema democrático, que es, en primer lugar, el más ruinoso sistema de derroche de energías. Un hombre dotado para la altísima función de gobernar, que es tal vez la más noble de las funciones humanas, tenía que dedicar el ochenta, el noventa o el noventa y cinco por ciento de su energía a sustanciar reclamaciones formularias, a hacer propaganda electoral, a dormitar en los escaños del Congreso, a adular a los electores, a aguantar sus impertinencias, porque de los electores iba a recibir el Poder; a soportar humillaciones y vejámenes de los que, precisamente por la función casi divina de gobernar, estaban llamados a obedecerle; y si, después de todo eso, le quedaba un sobrante de algunas horas en la madrugada, o de algunos minutos robados a un descanso intranquilo, en ese mínimo sobrante es cuando el hombre dotado para gobernar podía pensar seriamente en las funciones sustantivas de Gobierno.

»Vino después la pérdida de la unidad espiritual de los pueblos, porque como el sistema funcionaba sobre el logro de las mayorías, todo aquel que aspiraba a ganar el sistema ,tenía que procurarse la mayoría de los sufragios. Y tenía que procurárselos robándolos, si era preciso, a los otros partidos, y para ello no tenía que vacilar en calumniarlos, en verter sobre ellos las peores injurias, en faltar deliberadamente a la verdad, en no desperdiciar un solo resorte de mentira y de envilecimiento. Y así, siendo la fraternidad uno de los postulados que el Estado liberal nos mostraba en su frontispicio, no hubo nunca situación de vida colectiva donde los hombres injuriados, enemigos unos de otros, se sintieran menos hermanos que en la vida turbulenta y desagradable del Estado liberal.

»Y, por último, el Estado liberal vino a depararnos la esclavitud económica, porque a los obreros, con trágico sarcasmo, se les decía: «Sois libres de trabajar lo que queráis; nadie puede compeleros a que aceptéis unas u otras condiciones; ahora bien: como nosotros somos los ricos, os ofrecemos las condiciones que nos parecen; vosotros, ciudadanos libres, si no queréis, no estáis obligados a aceptarlas; pero vosotros, ciudadanos pobres, si no aceptáis las condiciones que nosotros os impongamos, moriréis de hambre, rodeados de la máxima dignidad liberal». Y así veríais cómo en los países donde se ha llegado a tener Parlamentos más brillantes e instituciones democráticas más finas, no teníais más que separamos unos cientos de metros de los barrios lujosos para encontramos con tugurios infectos donde vivían hacinados los obreros y sus familias, en un límite de decoro casi infrahumano. Y os encontraríais trabajadores de los campos que de sol a sol se doblaban sobre la tierra, abrasadas las costillas, y que ganaban en todo el año, gracias al libre juego de la economía liberal, setenta u ochenta jornales de tres pesetas.

»Por eso tuvo que nacer, y fue justo su nacimiento (nosotros no recatamos ninguna verdad), el socialismo. Los obreros tuvieron que defenderse contra aquel sistema, que sólo les daba promesas de derechos, pero no se cuidaba de proporcionarles una vida justa.

»Ahora, que el socialismo, que fue una reacción legítima contra aquella esclavitud liberal, vino a descarriarse, porque dio, primero, en la interpretación materialista de la vida y de la Historia; segundo, en un sentido de represalia; tercero, en una proclamación del dogma de la lucha de clases.

»El socialismo, sobre todo el socialismo que construyeron, impasibles en la frialdad de sus gabinetes, los apóstoles socialistas, en quienes creen los pobres obreros, y que ya nos ha descubierto tal como eran Alfonso García Valdecasas; el socialismo así entendido, no ve en la Historia sino un juego de resortes económicos: lo espiritual se suprime; la Religión es un opio del pueblo; la Patria es un mito para explotar a los desgraciados. Todo eso dice el socialismo. No hay más que producción, organización económica. Así es que los obreros tienen que estrujar bien sus almas para que no quede dentro de ellas la menor gota de espiritualidad.

»No aspira el socialismo a restablecer una justicia social rota por el mal funcionamiento de los Estados liberales, sino que aspira a la represalia; aspira a llegar en la injusticia a tantos grados más allá cuantos más acá llegaran en la injusticia los sistemas liberales.

»Por último, el socialismo proclama el dogma monstruoso de la lucha de clases; proclama el dogma de que las luchas entre las clases son indispensables, y se producen naturalmente en la vida, porque no puede haber nunca nada que las aplaque. Y el socialismo, que vino a ser una crítica justa del liberalismo económico, nos trajo, por otro camino, lo mismo que el liberalismo económico: la disgregación, el odio, la separación, el olvido de todo vínculo de hermandad y de solidaridad entre los hombres.

»Así resulta que cuando nosotros, los hombres de nuestra generación, abrimos los ojos, nos encontramos con un mundo en ruina moral, un mundo escindido en toda suerte de diferencias; y por lo que nos toca de cerca, nos encontramos en una España en ruina moral, una España dividida por todos los odios y por todas las pugnas. Y así, nosotros hemos tenido que llorar en el fondo de nuestra alma cuando recorríamos los pueblos de esa España maravillosa, esos pueblos en donde todavía, bajo la capa más humilde, se descubren gentes dotadas de una elegancia rústica que no tienen un gesto excesivo ni una palabra ociosa, gentes que viven sobre una tierra seca en apariencia, con sequedad exterior, pero que nos asombra con la fecundidad que estalla en el triunfo de los pámpanos y los trigos. Cuando recorríamos esas tierras y veíamos esas gentes, y las sabíamos torturadas por pequeños caciques, olvidadas por todos los grupos, divididas, envenenadas por predicaciones tortuosas, teníamos que pensar de todo ese pueblo lo que él mismo cantaba del Cid al verle errar por campos de Castilla, desterrado de Burgos:

»¡Dios, qué buen vasallo si ovierá buen señor!

»Eso vinimos a encontrar nosotros en el movimiento que empieza en ese día: ese legítimo soñar de España; pero un señor como el de San Francisco de Borja, un señor que no se nos muera. Y para que no se nos muera, ha de ser un señor que no sea, al propio tiempo, esclavo de un interés de grupo ni de un interés de clase.

»El movimiento de hoy, que no es de partido, sino que es un movimiento, casi podríamos decir un antipartido, sépase desde ahora, no es de derechas ni de izquierdas. Porque en el fondo, la derecha es la aspiración a mantener una organización económica, aunque sea injusta, y la izquierda es, en el fondo, el deseo de subvertir una organización económica, aunque al subvertiría se arrastren muchas cosas buenas. Luego, esto se decora en unos y otros con una serie de consideraciones espirituales. Sepan todos los que nos escuchan de buena fe que estas consideraciones espirituales caben todas en nuestro movimiento; pero que nuestro movimiento por nada atará sus destinos al interés de grupo o al interés de clase que anida bajo la división superficial de derechas e izquierdas.

»La Patria es una unidad total, en que se integran todos los individuos y todas las clases; la Patria no puede estar en manos de la clase más fuerte ni del partido mejor organizado. La Patria es una síntesis trascendente, una síntesis indivisible, con fines propios que cumplir; y nosotros lo que queremos es que el movimiento de este día, y el Estado que cree, sea el instrumento eficaz, autoritario, al servicio de una unidad indiscutible, de esa unidad permanente, de esa unidad irrevocable que se llama Patria.

»Y con eso ya tenemos todo el motor de nuestros actos futuros y de nuestra conducta presente, porque nosotros seríamos un partido más si viniéramos a enunciar un programa de soluciones concretas. Tales programas tienen la ventaja de que nunca se cumplen. En cambio, cuando se tiene un sentido permanente ante la Historia y ante la vida, ese propio sentido nos da las soluciones ante lo concreto, como el amor nos dice en qué caso debemos reñir y en qué caso nos debemos abrazar, sin que un verdadero amor tenga hecho un mínimo programa de abrazos y de riñas.

»He aquí lo que exige nuestro sentido total de la Patria y del Estado que ha de servirla.

»Que todos los pueblos de España, por diversos que sean, se sientan armonizados en una irrevocable unidad de destino.

»Que desaparezcan los partidos políticos. Nadie ha nacido nunca miembro de un partido político; en cambio, nacemos todos miembros de una familia; somos todos vecinos de un Municipio; nos afanamos todos en el ejercicio de un trabajo. Pues si ésas son nuestras unidades naturales, si la familia y el Municipio y la corporación es en lo que de veras vivimos, ¿para qué necesitamos el instrumento intermediario y pernicioso de los partidos políticos, que, para unimos en grupos artificiales, empiezan por desunimos en nuestras realidades auténticas?

»Queremos menos palabrería liberal y más respeto a la libertad profunda del hombre. Porque sólo se respeta la libertad del hombre cuando se le estima, como nosotros le estimamos, portador de valores eternos; cuando se le estima envoltura corporal de un alma que es capaz de condenarse y de salvarse. Sólo cuando al hombre se le considera así, se puede decir que se respeta de veras su libertad, y más todavía si esa libertad se conjuga, como nosotros pretendemos, en un sistema de autoridad, de jerarquía y de orden.

»Queremos que todos se sientan miembros de una comunidad seria y completa; es decir, que las funciones a realizar son muchas: unos, con el trabajo manual; otros, con el trabajo del espíritu; algunos, con un magisterio de costumbres y refinamientos. Pero que en una comunidad tal como la que nosotros apetecernos, sépase desde ahora, no debe haber convidados ni debe haber zánganos.

»Queremos que no se canten derechos individuales de los que no pueden cumplirse nunca en casa de los famélicos, sino que se dé a todo hombre, a todo miembro de la comunidad política, por el hecho de serio, la manera de ganarse con su trabajo una vida humana, justa y digna.

»Queremos que el espíritu religioso, clave de los mejores arcos de nuestra Historia, sea respetado y amparado como merece, sin que por eso el Estado se inmiscuya en funciones que no le son propias ni comparta como lo hacía, tal vez por otros intereses que los de la verdadera Religión funciones que sí le corresponde realizar por sí mismo.

»Queremos que España recobre resueltamente el sentido universal de su cultura y de su Historia.

»Y queremos, por último, que si esto ha de lograrse en algún caso por la violencia, no nos detengamos ante la violencia. Porque, ¿quién ha dicho al hablar de "todo menos la violencia" que la suprema jerarquía de los valores morales reside en la amabilidad? ¿Quién ha dicho que cuando insultan nuestros sentimientos, antes que reaccionar como hombres, estamos obligados a ser amables? Bien está, sí, la dialéctica como primer instrumento de comunicación. Pero no hay más dialéctica admisible que la dialéctica de los puños y de las pistolas cuando se ofende a la justicia o a la Patria.

»Esto es lo que pensamos nosotros del Estado futuro que hemos de afanamos en edificar.

»Pero nuestro movimiento no estaría del todo entendido si se creyera que es una manera de pensar tan sólo; no es una manera de pensar: es una manera de ser. No debemos proponemos sólo la construcción, la arquitectura política. Tenemos que adoptar, ante la vida entera, en cada uno de nuestros actos, una actitud humana, profunda y completa. Esta actitud es el espíritu de servicio y de sacrificio, el sentido ascético y militar de la vida. Así, pues, no imagine nadie que aquí se recluta para ofrecer prebendas; no imagine nadie que aquí nos reunimos para defender privilegios. Yo quisiera que este micrófono que tengo delante llevara mi voz hasta los últimos rincones de los hogares obreros, para decirles: sí, nosotros llevamos corbata; sí, de nosotros podéis decir que somos señoritos. Pero traemos el espíritu de lucha precisamente por aquello que no nos interesa como señoritos; venimos a luchar porque a muchos de nuestras clases se les impongan sacrificios duros y justos, y venimos a luchar por que un Estado totalitario alcance con sus bienes lo mismo a los poderosos que a los humildes. Y así somos, porque así lo fueron siempre en la Historia los señoritos de España. Así lograron alcanzar la jerarquía verdadera de señores, porque en tierras lejanas, y en nuestra Patria misma, supieron arrostrar la muerte y cargar con las misiones más duras, por aquello que precisamente, como a tales señoritos, no les importaba nada.

»Yo creo que está alzada la bandera. Ahora vamos a defenderla alegremente, poéticamente. Porque hay algunos que frente a la marcha de la revolución creen que para aunar voluntades conviene ofrecer las soluciones más tibias; creen que se debe ocultar en la propaganda todo lo que pueda despertar una emoción o señalar una actitud enérgica y extrema. ¡Qué equivocación! A los pueblos no los han movido nunca más que los poetas, y ¡ay del que no sepa levantar, frente a la poesía que destruye, la poesía que promete!

»En un movimiento poético, nosotros levantaremos este fervoroso afán de España; nosotros nos sacrificaremos; nosotros renunciaremos, y de nosotros será el triunfo, triunfo que ¿para qué os lo voy a decir? no vamos a lograr en las elecciones próximas. En estas elecciones votad lo que os parezca menos malo. Pero no saldrá de ahí vuestra España, ni está ahí nuestro marco. Esa es una atmósfera turbia, ya cansada, como de taberna al final de una noche crapulosa. No está ahí nuestro sitio. Yo creo, sí, que soy candidato; pero lo soy sin fe y sin respeto. Y esto lo digo ahora, cuando ello puede hacer que se me retraigan todos los votos. No me importa nada. Nosotros no vamos a ir a disputar a los habituales los restos desabridos de un banquete sucio. Nuestro sitio está fuera, aunque tal vez transitemos, de paso, por el otro. Nuestro sitio está al aire libre, bajo la noche clara, arma al brazo, y en lo alto, las estrellas, Que sigan los demás con sus festines. Nosotros fuera, en vigilancia tensa, fervorosa y segura, ya presentimos el amanecer en la alegría de nuestras entrañas.»

Anónimo dijo...

Amigos:

Anònimo que escribe el dia 23 del corriente mes de diciembre, no dice que su transcripcion es el discurso que pronunciò J.A.P. de R. en el Teatro de la Comedia de Madrid, el dia 29 de octubre del año de 1933, exponiendo los puntos fundamentales de la Falange.Creo que este amigo ha hecho bien insertando este discurso, sobre todo para que los jòvenes y aquellos que nunca accedieron por cualquier razon a la lectura de dicho discurso asì como a otros de aquel joven falangista puedan tener motivos de estudio serio,dentro de los contextos historicos, sobre todo para comparar sus planteamientos con los que actualmente se dan en nuestra politica.

Para mì ya pasaron la epoca de estudios y de teorias, por eso procuro establecer siempre situaciones reales sobre todo en unos mensajes que no permiten la prolongaciòn de largos discursos y/o exposiciones.

Y por ahora no tengo màs que decir, sòlo apuntar como seudointelectual que soy, varias cosas a grandes rasgos, primero, que aquellos postulados y sueños no tuvieron èxito, ¿por que?. ¿Afectò su muerte al desarrollo politivo de su doctrina posteriormente?, Se aprovecharon otros?. ¿que paso, por fin?.¿o es quizàs lo que imaginarme rechazo?, segundo y lo mas importante tanto que da escalofrio al constatarlo, sus sueños se han hecho realidad al menos y ademàs en diversos planos intelectuales, vèase como por un lado el Comunismo/Socialismo ha fenecido y por otro como el Capitalismo a ultranza a penas duras se mantiene, si es que no estamos actualmente asistiendo a su desmantelamiento.

Nada màs. Espero que tomen la pluma los que tienen que tomarla. Ya sabeis que yo solo escribo modestamente como JR (anònimo)

Amigos de Tharsis dijo...

Anónimo de las 12,21. Introduces con tu artículo algunos puntos de vista de los que ya hemos hablado aquí, y desgraciadamente lo comprobamos día a día:
El estercolero moral en el que hemos caído; faltos de ética, principios y valores; en el que parece nos encontramos felices, y si no lo parece, a pintarlo de color rosa se afana el desgobierno ZP. No hay más que echar mano a la prensa y sentir nauseas por lo que pasa sin que pase nada:
-La familia del ultimo asesinado de ETA, Uría, se pregunta porqué lo mataron “si se sentía vasco y nacionalista” Que poca vergüenza con el dolor que deberían sentir por su familiar asesinado y por cómo se arrastran ante la ETA, lanzándole el mensaje de a quienes no tienen que matar.
-El caso de otros nacionalistas, que odian a España pero no el sueldo y las comodidades que le pagamos todos.
El parlamentario Rubalcaba, que se despide del parlamento vasco con el grito tan usado por los etarras. “gora euskadi askatuta”. O la otra nacionalista, atareada en descuartizarnos, aupada al ministerio de defensa, y que se le “olvida” vitorear a España.
-La distinta vara de medir para condenar a los jueces: al juez Ferrín Calamita, dos años
por un retraso sin consecuencias luctuosas. Al juez Rafael Tirado, 1500 euros, cuando su retraso pudo influir en el asesinato de una menor y creó alarma social.
-Que de la muerte de un indigente, ocurrida en Huelva hace unos días, se haya declarado culpable un menor fugado de un Centro, y lo hizo para robarle.
Y tantas y tantas malas noticias referidas a la economía, al desempleo, a los abusos y mentiras de los políticos, etc, etc.
Por hoy deseamos para todos vosotros lo mismo que queremos para nosotros: Una Feliz Navidad. Que tengamos los mejores propósitos para el año próximo. Y que perseveremos en la defensa de la libertad.

P.D.
Nada más que una sugerencia, si os parece bien. Quienes entráis cómo anónimo lo podíais hacer con cualquier nombre, o firmar con cualquier otro, no perderíais vuestro anonimato y a la hora de establecer respuesta citaríamos el nombre en cuestión. Ejemplo: J R, al que desde aquí saludamos y felicitamos por sus oportunas intervenciones.

Anónimo dijo...

TODOS A MADRID, MAÑANA DIA 28 DE DICIEMBRE 2008

Mañana en Madrid y en la Plaza de Colon a las 12 de la mañana se reunirà la familia española, con motivo de la Festividad de la Sagrada Familia.

Alli estarà la familia española compuesta por niños, padres, abuelos, familiares, muchos llevaran a sus mascotas esas que les hacen compañias en su soledad.
Una vez mas veremos como gente lisiada en sus sillas iran cantando y rezandp por todos pero tambien para que el Gobierno respete a la familia. Estaràn los abuelos con sus nietos, enfermos que llevaràn la cruz de Jesucristo, estaràn todos con sus costumbres, su historia, su amor al pròjimo sus cantos al Altìsimo con la palabra de Dios y de su representante en la tierra.

Rezaran por todos aquellos que se apartaron de la senda del bien. Para que la familia no desaparezca y sus valores se conserven, para recordar a todos que si la familia desaparece lo pròximo serà la misma sociedad la que se extinga. Una sociedad no puede existir solo con el hedonismo, el aborto libre, la eutanasia indiscriminada y sin control y la adoracion al becerro de oro. Hay que defender otros valores aquellos que han hecho que hayamos avanzado en la historia aun a pesar de las chinitas que se encontaron en los caminos del Señor.

No es una manifestaciòn polìtica.
Es la celebracion festiva de nuestros valores y para que puedan continuar en el tiempo y el espacio
pidiendo respeto por nuestras costumbres y nuestra historia.

La gente que ya llegò ayer a la capital hacen colas para verlos en los innumerables Portales de Belen que se encuentran no solo en las instituciones locales y autonomicas (Ayuntamiento y Comunidad) y tambien en las antiquisimas y llenas de historia cientos de iglesias de Madrid.
JR.
!!Todos a Madrid!!